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Artículo del 30 de julio en The Atlantic Monthly en los Estados Unidos, título original: La guerra de búsqueda de inteligencia artificial ha comenzado en pleno apogeo Cada momento, personas de todo el mundo introducen decenas de miles de términos en los motores de búsqueda, generando billones de búsquedas cada año. Miles de millones de personas navegan por los sitios de motores de búsqueda de Internet.incluidos Google, Microsoft yIA abiertaMuchas empresas tecnológicas poderosas, incluidasinteligencia artificial generativa(IA) tiene la oportunidad de remodelar este campo y están compitiendo para aprovechar esta oportunidad: la guerra de búsqueda de IA ha comenzado en pleno apogeo.

El valor de una barra de búsqueda de IA es obvio: en lugar de abrir y leer múltiples enlaces, ¿no sería mejor escribir su pregunta en la página de un chatbot y obtener una respuesta al instante? Sin embargo, para que este enfoque funcione, el modelo de IA debe poder extraer información relevante de la web.ChatGPT Casi dos años después de su introducción, los usuarios son cada vez más conscientes de que muchos productos de IA en realidad se basan en el robo de información, y las empresas de tecnología están tratando de establecer relaciones con los editores de medios que ofrecen este contenido. Ahora, la IA puede masticar y regurgitar antes de decidir qué ve el usuario en función de sus opacos algoritmos subyacentes. También significa que las organizaciones de medios que actualmente muestran anuncios y venden suscripciones a muchos usuarios tendrán menos motivos para visitar los sitios web de los editores de medios.

Los modelos de IA no capturan la información más reciente más allá de los datos de entrenamiento, que a menudo tienen meses o años de antigüedad. En junio de este año, cuando hablé por primera vez con Shevelenko, director comercial de la empresa de búsqueda de IA Perplexity, dijo: “Uno de los factores clave de nuestro éxito a largo plazo es que los editores de medios continúen creando noticias ricas en hechos, porque Si no es exacto, si no tienes el material original, la IA no podrá responder muy bien”.

Las empresas de inteligencia artificial no parecen ver las palabras, fotografías y videos humanos como obras de arte o productos de trabajo, sino que ven el contenido como depósitos mineros de información; "La gente viene a Perplexity no para consumir noticias, sino para consumir hechos", me dijo Severenko. La perplejidad y los periodistas no compiten directamente: el primero responde preguntas y el segundo da noticias u ofrece opiniones e ideas. Pero Severenko reconoció que las búsquedas con IA traerán menos tráfico a los sitios de medios que los motores de búsqueda tradicionales porque los usuarios tienen menos razones para hacer clic en los enlaces: los robots brindan respuestas directamente. Por lo tanto, el acuerdo entre la IA y los medios es cada vez más una forma de chantaje.

Pero los medios de comunicación también tienen al menos cierta capacidad para limitar la capacidad de los motores de búsqueda de inteligencia artificial para leer sus sitios, negándose a firmar o renegociar acuerdos, o incluso demandando a empresas de inteligencia artificial por infracción de derechos de autor, como lo ha hecho el New York Times. Las empresas de IA parecen tener sus propias formas de sortear los obstáculos de los medios, pero se trata de una carrera armamentista en curso sin un ganador claro. Es posible que empresas como OpenAI ganen la guerra de búsqueda de IA no dependa exclusivamente de su software: los socios de medios también son una parte importante de la ecuación.

La guerra de búsqueda de IA está tratando de cambiar la forma en que las personas navegan por Internet, la vasta red que organiza y difunde el conocimiento en el mundo actual. Pero la base subyacente no ha cambiado: el conocimiento, en cualquier forma que exista, sigue siendo producto de la experiencia, la sabiduría y el pensamiento humanos, no la comprensión mecánica de los robots. (Autor Matteo Wang, traducido por Chen Xin)